Impulsar la igualdad de trato y no discriminación implica en primer lugar y de base entender y asumir la diversidad como parte inherente al ser humano, todos somos diferentes al resto, no estamos producidos en serie, y nadie merece que se le coloquen etiquetas que faciliten la discriminación.
Ese impulso requiere en segundo lugar tener empatía. Si soy capaz de ponerme en la piel del otro no reproduciré acciones, estereotipos ni ideas que conduzcan a esa discriminación.
Desde mi puesto de trabajo en la administración y a nivel personal lo más inmediato que puedo realizar es tratar a las personas que atiendo como me gustaría que lo hiciesen conmigo. Al fin y al cabo, todos somos usuarios en algún momento.
He seleccionado como buena práctica la realizada por la entidad “Fundación Secretariado Gitano” en colaboración con el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, cuya acción se dirige a la promoción integral de la comunidad gitana desde la atención a la diversidad cultural, prestando especial interés al programa “Promociona” que comienza cuando la población destinataria está en el último ciclo de la Educación Primaria y le acompaña durante la Educación Secundaria.
El programa tiene ámbito nacional desarrollándose en 49 ciudades de 13 comunidades autonómicas y el principal objetivo que pretende conseguir es que la población gitana no se constituya en una tipología de alumnado de bajo rendimiento y alto fracaso escolar y abandono temprano del sistema educativo pues según diversos estudios realizados desde la propia Fundación las cifras muestran que solamente el 20% de los alumnos gitanos finalizan la ESO.
En el 1982 se crea para prestar apoyo a asociaciones, en los 90 ponen en marcha políticas para los más excluidos y crean el Centro de Documentación (hoy referente internacional), en 2001 se promueve un cambio de mentalidad que invita a superar la dependencia de las rentas sociales y a apostar por la formación y el trabajo y en el 2021 señalará un doble hito, por primera vez una persona gitana está al frente y además es mujer. Un paso que es coherente con las metas estratégicas, carácter y valores.
ÁMBITOS EN LOS QUE ACTÚA
A nivel individual se realiza un plan de trabajo a medida para cada alumno y familia para que desarrollen las competencias necesarias para lograr el éxito escolar y el agente responsable del desarrollo del plan trabaja con los responsables educativos del centro escolar al que asiste el alumno.
A nivel grupal se realizan sesiones para: aprender en grupo, de apoyo escolar para trabajar competencias básicas y trasversales y para reforzar los conocimientos de diferentes asignaturas, de orientación, trabajar rutinas, debatir sobre la importancia de la educación y se ofrece información actualizada sobre recursos educativos o itinerarios a seguir.
A nivel sociocomunitario se realizan sesiones de formación y asesoramiento dirigido a profesionales de este ámbito, se apuesta por el trabajo en red con el entorno y los agentes sociales cercanos al alumnado, se realizan campañas de sensibilización a la comunidad gitana, los centros educativos y a la sociedad en general. Aunque el foco principal de las campañas relacionadas con la educación es la propia comunidad gitana.
De manera directa se realizan reuniones formativas, entrevistas, actuaciones individualizadas en domicilios; de manera indirecta se realizan desarrollos de planes para el mantenimiento y seguimiento del alumnado en secundaria en el cual se incluye un componente de atención familiar (compromiso y corresponsabilidad); y de manera transversal se realizan campañas de sensibilización.
Se trata de hacer un ajuste entre las pautas relacionales, las normas y los valores de la sociedad en la que están insertos y las de la propia cultura gitana.
IMPACTO Y RESULTADOS
El impacto y resultado más evidente es que desde su puesta en marcha en 2009, cerca de 1600 alumnos y alumnas se han graduado en E.S.O, y la mayor parte ha continuado en estudios postobligatorios.
El carácter preventivo del programa es fundamental. Antes de que se realice el abandono de estudios durante la educación secundaria (sólo el 20% finaliza esta etapa, situación de alto riesgo de exclusión) se realizan programas de formación dentro del ámbito familiar para los componentes familiares mayores y talleres dirigidos al ámbito de la cultura propia respecto a la situación de las mujeres en la comunidad para un cambio efectivo de roles y promoción de la igualdad.
La principal contribución que realiza al entorno social radica en la promoción integral de la comunidad gitana desde la atención a la diversidad cultural con un enfoque multidisciplinar y tratar de integrar el medio más cerrado típico de la comunidad gitana y el medio general de la sociedad, interrelación de los dos sin renunciar a la cultura propia, sin asimilación.
Por último, la contribución al entorno socioambiental se basa en la atención a la relación herencia-cultura-medio pues resultaría inútil separar los tres tipos de influencias que producen el desarrollo de cada individuo ya que en él están presentes, como base de su personalidad, una constitución biológica y la influencia que recibe del ambiente en el que vive. La herencia supone recibir de los progenitores una serie de rasgos que condicionan de partida nuestras posibilidades, pero estos a través de la influencia del medio, pueden ser potenciados, disminuidos, etc., será el medio o un determinado ambiente el que nos dará las oportunidades para su desarrollo.
PUNTOS FUERTES Y DEBILIDADES
Como puntos fuertes tenemos:
La labor socioeducativa bidireccional que realiza tanto hacia el interior de la comunidad como hacia el exterior intentando conjugar sus acciones desde una visión intercultural que atienda la dualidad igualdad-diversidad.
El carácter preventivo del programa haciendo que el trabajo comience desde el ámbito familiar y continúe después en diversos ámbitos que abarcan el desarrollo de los individuos a través de actuaciones durante la educación primaria y la educación secundaria, el fomento de cambio de hábitos y roles en igualdad y de género, etc…
La panorámica de la realidad cultural la FSG al considerar que toda la sociedad debe comprometerse en esta misión y por ello realiza campañas de sensibilización, campañas de comunicación, actuaciones dirigidas a la promoción de la igualdad de trato y de género y promoción de la cultura gitana en la que destaquen elementos esenciales y positivos del pueblo gitano frente a los estereotipos y prejuicios; cuando se conoce una realidad de manera directa estos últimos se difuminan.
Como debilidades tenemos:
Se habla de la existencia de un equipo humano intercultural, diverso, profesional y comprometido pero no especifica en concreto las titulaciones o formación de los componentes de los equipos técnicos que intervienen en cada uno de los programas que desarrolla. Así por ejemplo, menciona un equipo técnico compuesto por 260 trabajadores para el desarrollo del Programa sin especificar ningún dato más.
El principio de igualdad de trato, consiste en proporcionar un tratamiento igualitario a todos los seres humanos, tanto en su vertiente formal o jurídica (ante la ley), como en su vertiente material o real (ante la sociedad), como punto de partida pero con adaptación a las necesidades específicas existentes derivadas de la diversidad del ser humano.
La discriminación consiste, en dar un trato diferente a unas personas frente a otras en función de una característica personal que la diferencia de la mayoría existente en el contexto en el que se desarrolla.
Cuando uno lee sobre el reconocimiento del principio de igualdad de trato, desde el ámbito internacional, europeo, estatal e incluso a nivel autonómico o local, parece que sólo corresponde a los poderes públicos realizar acciones a favor de él. Pero pienso, que se olvida la vertiente ética y social, es decir; el principio de igualdad como valor de la sociedad que corresponde a cada uno de nosotros como ciudadanos y elementos activos de dicha sociedad. Se trata nada más que del desarrollo de una ciudadanía activa y comprometida que hace sus pequeñas aportaciones, a modo de granitos de arena y no espera que los demás, en forma de autoridades, poderes o administraciones públicas, sean los únicos responsables de actuar.
EXPERIENCIA PERSONAL
A principios de los años 90, comencé a trabajar en una empresa de telecomunicaciones de la Comunidad Valenciana. Por aquel entonces, dicho sector (como la gran mayoría de ellos), aún mantenían conceptos de prevalencia masculina en puestos de responsabilidad. Hecho que quedo manifiestamente claro desde el comienzo, ya que mi currículo estaba muy por encima de la mayoría de los compañeros, y sin embargo en modo alguno opté a cargos medios o superiores. Curiosamente las condiciones económicas de compañeros que realizaban las mismas funciones (incluso inferiores en algunos casos), eran más elevadas que las mías.
Con el pasar del tiempo, mi actividad dentro de la empresa, pasó de administrativa pura y dura, a responsable del departamento de instalaciones y gestión con la central provincial de la empresa en la que trabajaba. Debo decir, que la carga de trabajo, así como la responsabilidad que recaía sobre mi, crecía en relación directamente desproporcionada con mi remuneración. Llegando al punto de percibir un salario significativamente inferior que algunos de los instaladores a los que dirigía y controlaba.
Como cabía esperar, en repetidas ocasiones me dirigí al gerente de la empresa, con el fin de regularizar la situación, encontrándome una y otra vez con excusas hilarantes, cuando no moderadamente humillantes por mi condición de mujer frente a mis subalternos. Comentarios como «no puedes cobrar más que ellos», se convirtieron en el argumentario inexcusable de un empresario de mente estrecha, con poca o nula capacidad para valorar mi trabajo por encima de la prenda que cubría mis piernas (falda frente a pantalón).
La situación de exigencia, llegó a provocarme un estrés inaguantable en el trabajo y con el jefe. Todos los problemas relacionados con instalaciones en la empresa pasaban por mis manos, y la responsabilidad de resolverlos dependía exclusivamente de mí. Encontrándome en más momentos de los deseados con situaciones que exigían un plus de empatía inaceptable hacia una empresa que no sólo no mostraba una actitud recíproca de compromiso conmigo, sino que muy al contrario, desdeñaba de manera implícita el trabajo que venía realizando durante años como máxima responsable de instalaciones, reparaciones y comunicación con la empresa madre de telecomunicaciones.
Convertida en víctima del ostracismo profesional al que me sometió de manera sibilina el empresario, mi estado emocional se vio mermado hasta el punto de llevarme a una depresión. Sentía que siempre tenía que estar trabajando el doble para demostrar que estaba capacitada y al mismo nivel que el resto de compañeros.
Las estrategias para acabar con este tipo de discriminación, pasan en primer lugar por la base, que no es otra cosa que la educación en valores de igualdad desde la infancia, tanto por parte de los padres como por los docentes. Pero no es menos cierto, que la voluntad política y de los agentes sociales debe dar luz a una reforma necesaria y justa. Cabe preguntarse, si es lógico que en el siglo XXI, una mujer cobre menos que un hombre cuando realiza el mismo trabajo. Éstos deberían ser el espejo en el que se mirase una sociedad que como evidencia la situación, precisa de la luz de un faro que les dirija hacia una realidad coherente. Una sociedad equitativa, que verdaderamente valore a todas y todos por igual, sin abismos infinitos en los que millones de mujeres se ven cada fin de mes al firmar una nómina que las discrimina, única y exclusivamente por haber nacido mujer.
Esta categoría está destinada a servir de diario de aprendizaje de la acción formativa que le da su nombre.
Hace ya más de 10 años creé este blog en respuesta a una de las actividades de la asignatura de Comunicación y Educación del Grado de Pedagogía, pero aunque pensaba seriamente seguir subiendo conocimientos y reflexiones, se quedó olvidado. Ahora, gracias al curso de Igualdad de trato y no discriminación, volverá a estar activo, pues cuando se planteó en el Modulo 0 la posibilidad de abrir un blog nuevo o usar uno que ya tuviésemos, la decisión fue fácil…usaría el blog existente.
No porque fuera más fácil, sino porque me parece que la temática cuadra bien en él pues considero que la igualdad de trato y la no discriminación es un tema que deberíamos conocer y en el que deberíamos educar a los niños si queremos gestionar y que gestionen de una manera adecuada la diversidad de la sociedad actual de la que todos somos parte.
Mi interés por la inclusión, la diversidad, la empatía y la gestión de calidad hacen que este curso sea realmente interesante para mí.
padres de adolescentes 